El angel de la vida y la muerte (3a parte--FINAL)

Polet no cambio para nada su actitud cuando su esposo murió, le lloro lágrimas de fantasía en su funeral y conmovió a mucha gente con su fantástica actuación de esposa triste y desconsolada.
Pero poco le duro la tristeza.

Su actitud seguía siendo la misma arrogante de siempre, apeas se le reconocía, ella no era la misma de siempre.

Así pues y dejo de frecuentar a sus padres, poco a poco los había abandonado y a veces hasta se le olvidaba enviar el cheque que necesitan para sobrevivir ya que debido a su edad no les era posible seguir manteniéndose solos.

Una tarde los padres, ya resegándose a la pérdida del amor de su hija, se encontraban caminando en el parque, hicieron un recuento de su vida y como la dedicaron a su hija, se dieron cuenta que ellos no eran los culpables los malos actos de la misma, ellos siempre e dieron todo su amor. Se dispusieron a seguir lo que les quedaba de vida disfrutando solo de ellos y dejarían de lamentarse de una vez por todas lo que sucedió.

Estaban tan metidos en sus pensamientos cuando de pronto un fuerte estruendo los interrumpió, un coche se quedo sin frenos, iba a muy alta velocidad y se volcó justo sobre ellos.
La madre de Polet murió instantáneamente, pero su padre, por desgracia, no corrió con la misma fortuna.

Polet nunca se apareció en el funeral de su madre, y para no cambiar la rutina, a su padre solo le enviaba cheques al hospital, pero eso no le hacía nada de gracia, su fortuna se agotaría y enferma ya de maldad tomo una decisión que la sacaría de ese dilema.
Se dirigió al hospital en el que se encontraba su padre haciendo una pequeña pausa en una farmacia de paso.

Al llegar al cuarto donde se encontraba su padre saco una jeringa de su bolso, mas cuando se disponía a preparar la botella de droga que había adquirido recientemente, entró una enfermera interrumpiendo así su plan.

Su sorpresa fue tal que decidió salir de inmediato del cuarto.

Fuera del hospital, se sentó frente e una fuente, estaba perdida en sus pensamientos cuando de momento sintió un hilo helado que recorría todo su cuerpo al mismo tiempo que hacia latir su corazón latir tan fuerte que podía escucharlo como si estuviera fuera de su cuerpo. Volvió la mirada hacia el lugar donde estaba aquel niño, pero este había desaparecido, tal como su dolor.
Pensando estar paranoica y sin titubear mas, volvió a entrar al hospital, esta vez decidida a todo.
En el pasillo vio nuevamente al niño que tanto efecto hubiera tenido en ella, esta vez rompió el silencio y le pregunto:

-¿Quién eres?, ¿Qué haces aquí?

A lo que el niño respondió:

-Yo vengo porque quiero salvar una vida, porque me gustan las oportunidades, porque hasta hoy he tenido fe en mis actos.

Polet decidió no prestar más atención a semejantes palabras, ¿qué caso tenía ayudar al prójimo? si la vida es para vivirla uno mismo y no dar por los demás que cada quien es responsable de sí mismo.

Sin dudar se dirigió al cuarto de su padre, esta vez nada la detendría. Preparó la inyección y al entrar a la habitación la aplico directamente al suero… echó un último vistazo noto que los ojos de su padre se abrieron, su última mirada era de amor, después de un suspiro murió.
El viento movió bruscamente las cortinas de la ventana y una silueta apareció en ellas. Era el mismo niño que había visto y presenció lo sucedido.

Esta vez su rostro expresaba mucho dolor, mismo que Polet sintió nuevamente en el pecho, el niño preguntó ¿Por qué? Y Polet cayó de rodillas, el dolor era cada vez más intenso.
Ese niño estaba muy triste, no podía más, una lágrima estaba a punto de salir de sus ojos, el dolor de Polet aumentaba, cuando la lágrima cayó la mejilla de aquel pequeño el corazón de Polet estalló, no aguantó más, ella se desvaneció sin vida.

El pequeño se sentó de espaldas a la puerta, abrazó sus rodillas y siguió llorando mientras fuera del cuarto una voz decía:

-“Fue un Ángel, un Ángel salvó a nuestro hijo”…

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Espero les haya gustado este cuento... Como ya lo dije antes, en mis épocas de Bachillerato me llevo a ganar un buen lugar, pero debido a la edad en que lo escribí, no lo considero el mejor... quizas un día de estos mi imagincaión haga de las suyas y escriba algo mas...

See ya!!!

See ya!!!

8 de Abril.. FELICIDADES YOGUI!!!

Pues la verdad, he de admitir que estoy en chinga loca en el trabajo, que tengo mil cosas que hacer, que se me esta haciendo tarde para mil proyectos… pero no podía dejar pasar el día sin antes mandar una tremenda felicitación a mi amiguis de alma Yogui!!!

Ojala que tu esposa Dani te consienta mucho, que tus amigos te llenen de abrazos, el osco te haga un chocolate con su dedo… etc. etc. etc. (todo lo que pediste)…

Pásatela súper maniwis, muchas gracias por tu amistad

El angel de la vida y la muerte (2a parte)

La pequeña Polet estaba creciendo rápidamente, sus padres la amaban tanto, pero el sentimiento de culpa no los dejaba vivir en paz, anque muchas noches la sensacion de alivio de ver a su hija viva fue disimulando remordimiento.
Ellos pensaron que la vida les habia dado una oportunidad mas para tratar de darle lo mejor a su hija.

Pese a su imagen angelical (que nunca cambio), Polet se convirtió poco a poco en una persona fríbola y materialista, sus padres le reperían hasta el cansancio lo hermosa que ella era, tanto que la llevaron a sentirse realmente una “princesa de cuentos de hadas”.

El afán de darle lo mejo orilló a sus padres a sacrificar sus vidas y trabajar arduamente para darle todo lo que ella merecía sin darse cuenta que mientras mas la llenaban de riqueza, mas pobre le hacían el corazón.

A los 17 años a Polet solo le interesaban las cosas materiales y valoraba a la gente por la cantidad de ruqueza material que tenia. Se avegonzaba tanto del origen humilde de sus padres que casi nunca hablaba de ellos.
Jacqueline era el nombre de su mejor amiga, una muchachita un tanto descontrolada de acuerdo a su edad, que si bien no era de las mas adineradas al menos nada le faltaba.

Una rara ocasión, Polet decidió llevar a Jacqueline a su casa, la cual se encontraba en una zona exclusiva y residencial, era la casa mas humilde del área. A su amiga todo le resultó muy normal, convivió con Polet toda la tarde, pero cuando llegaron sus papas después de una larga jornada de trabajo ella cambio de actitud de una manera increible.
Los padres de Polet se emocionaron tanto de ver una visita en casa y no dudaron en atenderla lo mejor que podían, la madre se dirigió a la cocina y preparó una cena sencilla.

Polet refunfuño “Mamá no seas ridicula, Jacqueline esta acostumbrada a cosas mejores”. Su padre quizo hacer una broma y un grito mas se escucho “Ya papá! Me estas avergonzando”, volteó la mirada y exclamó “Amiga, no te descepciones de mi familia”.

El silencio se hizo presente y la amargura lleno los ojos de los padres que entendieron que no tenian mas valor para su hija que el que mostraba su cheque quincenal. Jacqueline estaba descepcionada pero de su amiga de la cual se fue alejando poco a poco.

Los años caminaban. Polet era ya una mujer, al terminar su carrera conoció un hombre muy noble de quien ni siquiera interesa el nombre ya que lo unico que vió en el fue que era de buena posición economica, dueño de una gran herencia y también un desausiado. Poco tiempo duro su matrimonio hasta que la muerte los separó.

En algún lugar, ninguna fecha en particular, una noche de tantas los milagros ocurren. Un sueño llego, un niño llora al ver la amargura de su corazon…


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Lo se, tardé un poco en regresar, pero con gusto les presento la segunda parte de mi cuento, espero les guste!

See ya!!!